La práctica no necesita de conocimientos o experiencia previa ya que se adapta a cada uno; si bien el Ashtanga Yoga es una disciplina que es conocida por su exigencia, intento generar en las clases que todos podamos apropiarnos de la práctica, sin importar edad, experiencia o estado físico, y con el tiempo hacer de ella un modo de encuentro revelador con nuestras potencialidades.
Dentro de la clase conviven dos dinámicas diferentes según el nivel en que se encuentre el alumno y su experiencia previa: Clases guiadas y Prácticas mysore (self-practice). En general al comenzar con la práctica, las primeras clases, se realizan guiadas para aprender los saludos al sol y las primeras posturas del Ashtanga Vinyasa Yoga con su correspondiente secuencia de respiración.
La intención es que el practicante adquiera más temprano que tarde autonomía y pueda ir recordando al menos esta primera parte de la serie, para pasar a una práctica individual en la que podremos profundizar nuestro proceso guiados según nuestras posibilidades y al mismo tiempo respetando nuestras necesidades y limitaciones. La transmisión de la práctica se da del maestro al alumno de modo individual y gradual, avanzando de modo ordenado en la serie y con bases sólidas, calma y firmeza.
Completa el equipo de trabajo, asistiendo en las prácticas de manera cuidadosa y supervisada: Nadia Kiako.
Nadia Kiako
Comenzó su práctica de Ashtanga en 2012 con Laura Lebedinsky luego de un recorrido variado por otras actividades corporales. Durante los primeros años participó de diversos seminarios como Taller de Profundización en la práctica, y Alineación y ajustes, junto a su maestra y en la sala de Ashtanga Yoga Buenos Aires. En 2015 realizó un workshop con Lino Miele y posteriormente tomó clases con Borja Romero Valdespino, en Madrid.
Movida por la curiosidad sobre el proceso individual de cada alumno, en 2017 comienza a desempeñarse como asistente de Laura Lebedinsky, enfocándose en la riqueza de la realización de cada asana como reflejo de la identidad de cada practicante, su historia y su personalidad. En 2018 comienza el Profesorado de Yoga en la Escuela de Veronica Belloli y complementa esa formación con otros talleres como Anatomía aplicada a la práctica en Espacio Namasté, y posteriormente workshops con maestros como Eddie Stern y Santina Giardina-Chard.
Exploradora y espectadora apasionada de estrategias de marca y comunicación, es además publicista, amante del cine y eterna fan de las cosas dulces.
En estas clases, trabajo, por ejemplo, con adultos mayores, en procesos de recuperación de enfermedades o pre-post quirúrgicos, embarazadas, mujeres atravesando post parto, etc.